Un emprendedor siempre está en búsqueda constante de conocimiento, no existen los límites para él. Sin embargo, para enfrentar la gran cantidad de retos en un mundo tan competitivo, hay aptitudes y actitudes que todo emprendedor debe tener.
Actualmente, son muchas las personas que se atreven a correr el riesgo a emprender. Todo esto se debe, en gran parte, a la era digital que estamos viviendo, ya que es más viable crear tu propio negocio. Sin embargo, sigue siendo vertiginoso alcanzar el éxito.
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Aptitud vs. actitud
Antes de conocer cuáles son las aptitudes y las actitudes que todo emprendedor debe tener, es importante establecer lo que significa cada uno de estos términos. De esta forma, podremos determinar la relación y las diferencias que hay entre ambos.
Sin importar si se trata de un emprendimiento personal o con la presencia de socios, conocer estos términos es fundamental para el próspero desarrollo de cualquier negocio.
Ahora bien, la aptitud es la capacidad o habilidad de un individuo para adquirir un conocimiento y para desenvolverse de manera espontánea en cualquier situación que se le presente. Cualquier persona que siga hábitos y rutinas específicas, puede llegar a adquirir aptitudes emprendedoras que le permitan lograr sus objetivos planteados.
Por otra parte, la actitud se conoce como la inclinación o disposición que tiene una persona a ejecutar una actividad específica con la finalidad de alcanzar una meta. Esto quiere decir, que es un término que se encuentra muy unido a la perseverancia y al esfuerzo personal y profesional.
¿Cuáles son las aptitudes que todo emprendedor debe tener?
Habilidades financieras
Los números son datos esenciales para cualquier tipo de negocio que se desee emprender. La importancia se debe a que, gracias a ellos, podrás medir los resultados obtenidos en tu negocio.
Ser un buen emprendedor requiere de conocimientos que para muchos son considerados talentos. Por ejemplo, saber calcular la rentabilidad de un negocio, los requerimientos financieros, determinar dónde invertir, realizar gestiones de tesorería, leer un balance, entre otros.
Si tienes esta habilidad, podrás desarrollar con más facilidad el plan de negocios, uno de los primeros pasos que se deben realizar para emprender. Allí se establecen los objetivos empresariales tomando en cuenta parámetros como ideas de proyecto, datos, tendencias y diversos estudios económicos.
Talento para las ventas
En todo negocio es vital vender. Y aquí nos encontramos con una aptitud que no se aprende de la noche a la mañana, pero se puede desarrollar.
Para vender un producto o servicio, es fundamental aplicar técnicas de ventas; y para llevar a cabo estas técnicas, es necesario conocer a profundidad el mercado. Recuerda que no solo debes considerar vender el producto o servicio, sino que la verdadera finalidad es la de cubrir los requerimientos de tus clientes.
Ten en cuenta que, no es tan importante el producto que vendes como el por qué lo vendes. Para que pueda ser reflejada una aptitud de venta, cada bien o servicio debe tener como objetivo crucial satisfacer una necesidad en un mercado.
Adaptación al mundo digital
Hoy en día, adoptar una aptitud digital es esencial para cualquier negocio, ya que las herramientas tecnológicas serán el medio que te permitirá avanzar y alcanzar más rápido tus objetivos.
Para promocionar un bien o servicio en esta era digital, lo más común es utilizar una página web que muestre lo que vendes en cualquier parte del mundo. Gracias a estas herramientas, las fronteras no existen en los negocios.
Sin importar el dispositivo tecnológico que tengas, las actividades que puedes gestionar son muchísimas. Además, podrás llevar tu agenda, tu rutina, comunicarte con clientes y proveedores, capacitarte, entre otras.
¿Cuáles son las actitudes que todo emprendedor debe tener?
Resiliencia
Al momento de emprender, es muy común que después de superar infinidad de obstáculos y esperas que todo empiece a funcionar, resulta todo lo contrario. Es aquí cuando entra en juego la resiliencia, esa actitud que no te permite rendirte y luchar contra cualquier percance.
Muchas personas confunden el término resiliencia, pero para un emprendedor, el ser resiliente se caracteriza por:
- Improvisación: todo emprendedor debe ser flexible y actuar de manera natural frente a situaciones poco usuales.
- Resistencia: comportarse de forma calmada cuando se le presentan situaciones cargadas de presión y convertirlas en eventos que dejan algún aprendizaje. La responsabilidad no es una carga, sino que se encara sin temor.
- Resolución: hacer frente a cada obstáculo o reto que se presente, siempre teniendo a mano una solución al problema.
Creatividad
Para un emprendedor, toda idea puede ser mejorada. Por ello, acostumbra a rodearse de personas creativas e innovadoras que le agreguen valor a su negocio.
Una característica de una persona con actitud creativa, es que no le gusta juzgar. Para un emprendedor ninguna idea es mala. Todo lo que se crea es de valor y puede aportar beneficios a un negocio.
La mayoría de los emprendedores empiezan su camino en el mundo de los negocios sin muchos recursos económicos, pero cargados de mucha imaginación. Esto los lleva a acercarse a sus clientes y hacer que todo sea posible.
Aceptación
Todo ser humano tiende a equivocarse, esto es importante que todo emprendedor lo tenga en cuenta para conseguir avanzar y no estancarse. No todas las ideas tienen éxito, por eso lo más recomendable es que permanezcas acompañado y te mantengas humilde, celebrando cada uno de tus logros pero siempre agradecido.
Si buscas emprender y tomas en cuenta cada uno de los talentos que te presentamos anteriormente, ten la certeza de que es muy probable que llegues a alcanzar el éxito en tu negocio.